Electrocardiógrafo de 12 canales de la marca Schiller
El número de electrodos es decisivo para la concreción del diagnóstico: cuanto mayor sea este número, más fiable y preciso será dicho diagnóstico.
Un electrocardiógrafo con cuatro derivaciones —tres electrodos y una toma de tierra— permite una monitorización básica. Puede medir la frecuencia cardíaca, detectar cambios en la frecuencia cardíaca, visualizar las ondas P, el complejo QRS, las ondas T. Los electrodos se suelen colocar en las muñecas y los tobillos. Los electrodos en los brazos y la pierna izquierda reflejan las variaciones eléctricas del corazón, mientras que el electrodo de la pierna derecha sirve como toma de tierra.
Un electrocardiógrafo con 12 derivaciones proporciona un diagnóstico más exhaustivo y preciso al eliminar el ruido y las perturbaciones de algunas derivaciones. Asimismo, permite supervisar partes específicas del corazón. Un electrocardiógrafo estándar de 12 derivaciones dispone de seis derivaciones periféricas —también llamadas derivaciones de los miembros— y seis derivaciones precordiales —conocidas del mismo modo como torácicas—.