Una placa ósea es un implante que se atornilla a un hueso, una articulación o varios segmentos óseos. Se utiliza para reducir una fractura ósea o corregir una deformidad ortopédica.
Una placa ósea es un implante que se atornilla a un hueso, una articulación o varios segmentos óseos. Se utiliza para reducir una fractura ósea o corregir una deformidad ortopédica.
Existen tres tipos principales de placas óseas: placas de compresión, placas de artrodesis y placas de osteotomía.
Según el caso, la placa ósea debe permitir:
Existen varios criterios que deben tenerse en cuenta a la hora de elegir una placa ósea, como el uso previsto, si se busca una placa bloqueada o no, la geometría de los agujeros y los materiales de los que está hecha.
Existen placas bloqueadas, cuyos agujeros tienen una rosca interna para fijar los tornillos, y placas no bloqueadas. Cada una presenta diferentes ventajas.
Ventajas de las placas óseas bloqueadas:
La principal ventaja de las placas óseas no bloqueadas es la mayor angulación posible al colocar los tornillos.
Podemos distinguir las placas óseas en función de la geometría de sus agujeros, que pueden ser simétricos o asimétricos.
El metal y los polímeros biorreabsorbibles son los materiales más utilizados en las placas óseas.
A continuación, se enumeran las ventajas y desventajas respectivas de las placas metálicas y de las placas reabsorbibles.
Ventajas:
Desventajas:
Ventajas:
Desventajas: